GORILLAZ Y SUS TRANSFORMACIONES

De banda animada a shows en vivo, su mayor desafío.

Gorillaz se formó a finales de los años 90, década de grunge y pop, con todas las diferencias que hay de por medio. Cuenta la historia que Damon Albarn, voz de Blur, y el fantástico ilustrador Jamie Hewlett, quienes compartían un piso en Londres, pasaban sus días viendo MTV. Poco a poco se convencieron de que necesitaban crear algún tipo de alternativa al pop manufacturado y recolector de billetes que veían pasar por su TV. En lugar de aspirar a crear «música real», diseñaron una banda que estuviera totalmente fuera de los límites de la realidad, más allá de lo físico y de los videoclips llenos de cuerpos con brillantina.

Irónicamente, la creación de la banda virtual Gorillaz fue la más recolectora de billetes y  popular de cualquier otro proyecto de Albarn y Hewlett, aunque todo lo que ellos hayan querido hacer era lo opuesto. Pero su inclinación hacia la ficción fue un punto importante, el sentido de aventura y de intriga los destaco del resto. 2D, Murdoc, Russel y Noodle se han convertido en estrellas fantásticas en su propio derecho, hebras de la imaginación extraña de sus fabricantes con historias tan complejas como una subtrama de Christopher Nolan.
Pero con la libertad que la creación de una banda ficticia de dibujos animados puede ofrecer -no tener que ser sincero en las entrevistas, crear música sin temor al escrutinio personal, no hablar de tu vida privada y la mejor parte, jugar con la imaginación de los oyentes – siempre tuvo un gran reto: traducir Gorillaz al escenario. ¿Cómo haces que el sentimiento fabricado, sea real en carne viva? Estrellas pop virtuales como Hatsune Miku omiten este problema potencial por ser tan hiper-digitalizado, ni siquiera se considera su tangibilidad. Pero Gorillaz, a pesar de todo, estaba diseñado para ser una banda.
A lo largo de los años, los shows en vivo de Gorillaz han evolucionado desde proyectos de make-do hasta frenesíes salvajes e interactivos. Con la noticia de la creación de su propio festival en el parque temático de Dreamland in Margate (10 de junio) en Reino Unido, aquí está una mirada de cómo fueron progresando en el escenario.

2000-2002 – The ‘Gorillaz’ era

Los primeros conciertos de Gorillaz nunca dieron ni el indicio de la idea de que esta banda llegaría a encabezar Glastonbury. Las imágenes de su show de debut en el Londres Scala muestran una mezcla de intriga y desconcierto en la cara de los espectadores. Fue emitido en su totalidad en MTV, y la mayoría de las imágenes consistían en patrones nebulosos y pixelados, en lugar de imágenes interactivas en 3D de los cuatro miembros de la banda. Suponiendo que esto se diseñó de tal manera por las limitaciones técnicas de la época, o el hecho de que Gorillaz estaban empezando. Pero en ese momento, todo era diferente. Y el Scala, un antiguo cine en Londres, fue el lugar perfecto para debutar este primer acercamiento a la imagen.

2005-2006 – The ‘Demon Days’ era

Para cuando el segundo álbum Demon Days rodó, los shows en vivo de Gorillaz habían tomado una imagen mucho más trabajada. Los premios británicos de 2002 fueron un punto de inflexión, un Murdoc delgado y un Noodle guitarrista lleno de energía se podían ver en forma 3D. El truco se repitió en los Grammys en 2005, donde realizaron ‘Feel Good Inc.’ junto a una sincronización perfecta. Luego vino el turno de Lady Madonna… bueno, una Madonna virtual. Quien se unió para dar un toque surrealista en su single ‘Hung Up’.
Los cinco días del Manchester Opera House en 2005 fue otro punto de transformación en su imagen. Por primera vez, la mayoría de lo que se estaba creando en vivo estaba en exhibición pública. Albarn permanecía proyectado en una pantalla, su silueta se acurrucaba sobre un piano. Flanqueado por cuerdas y una banda completa, este fue el espectáculo de Gorillaz adaptándose a escenarios más grandes y creando algo más abarcador que las caricaturas mismas.

2007-2010 – The ‘Plastic Beach’ era

Con el tercer álbum ‘Plastic Beach’, las colaboraciones fueron tan importantes para Gorillaz como sus ilusiones lúdicas. Snoop Dogg, Little Dragon, Lou Reed y Bobby Womack aparecieron en el LP de 2010, y sus shows llenos de invitados lo reflejaron.
En Glastonbury de ese año, como headliners de U2, tuvieron que encender hasta a Bono para lograr la conquista del estadio. Esta vez, Albarn abandonó la comodidad de jugar detrás de una pantalla, acaparando el centro de atención en el escenario con mucha acción, para hacer así la más jugada actuación de la historia del grupo.
Más de diez años después de su formación, los ideales subversivos y rebeldes de los primeros pasos de Gorillaz habían dado lugar a otras prioridades: la colaboración, la inclusión y el entretenimiento.

‘Demon Dayz Festival’ es la esperanza de la banda de seguir actuando y haciendo las cosas bajo sus propios términos y estilo, cómo lo fue en sus primeros shows. En este caso, estarán rodeados de un parque de diversiones y la costa inglesa de paisaje. El escenario perfecto para su regreso.
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